SOBRE EL PRIMER MINISTRO VAJPAYEE, SAI BABA , RAMA Y RÁVANA
Por Robert Priddy
La noticia por parte de una fuente anónima de que el Primer Ministro de la India Atal Bihari Vajpayee, esté deprimido porque ha recibido confirmación de que SB es un molestador sexual de niños está, por supuesto por confirmar. Sin embargo, aún así es interesante…noticias filtradas se han convertido en parte integral de la política de las facciones de gobierno y de enemigos políticos. No cabe duda que la lucha política es particularmente sucia y poco comprometedora en la India, lo cual puede ser visto en los masivos escándalos de corrupción que han sido expuestos en los niveles más altos una y otra vez. Por lo tanto ¿qué prueba existe de que esta noticia acerca de Vajpayee sea confiable?
Primeramente, no es muy factible que Vajpayee, después de haber firmado un documento público para librar a Sai Baba de cualquier acusación, anuncie ningún descubrimiento que ponga el documento en duda, aunque sea verdad que se le haya sido presentado cualquiera de los affidávit en contra de Sai Baba o alguna otra información condenadora por parte de víctimas o testigos, etcétera. Su gobierno, fuertemente orientado a lo hindú, es muy inestable, y aún más desde los recientes disturbios hindu-musulmanes, cosa que cualquier otro debacle no sería nada bien recibido ni por él ni por su hinduista y derechista Partido Bharatiya Janata (BJP). Sin embargo, dentro de de este partido y entre los compañeros de coalición existen fuerzas de mucha oposición a Sai Baba y éstas representan una fuerte facción en contra de Vajpayee tras bambalinas.
Justo antes de que Sai Baba ridiculizara los planes para un templo del dios Rama en Ayodhya unos meses después del incidente, el presidente del partido BJP, L.K. Advani, había sido visto sentado en las líneas de darshan en Prasanthi Nilayam, por un número de días, por un conocido mutuo, quien también me dijo que éste había tratado de conseguir el apoyo de Sai Baba para el templo del dios Rama. L.K. Advani es un hindú derechista aliado del Shankaracharya del Sur de la India (el que tiene la posición religiosa más alta de la India con la mayor cantidad de seguidores), quien ha declarado a Sai Baba como una encarnación, no del dios Rama, sino de Rávanna. Es interesante que Sai Baba haya dicho que Rávanna no era un ser común y corriente, sino que era un Mahatma (un ser elevado o gran alma) y que: "Rama y Rávana eran igualmente diestros en 36 formas de conocimiento. Rávana fue la cause principal de la muerte de sus hijos y sus hermanos porque no podía controlar su lujuria." (Sanathana Sarathi 8-1999, p. 219 – en inglés) Contradiciéndose a sí mismo (como es usual en él), Sai Baba también declaró que: "Rávana había alcanzado la maestría de 64 categorías de conocimiento, mientras que Rama sólo había estudiado 34 categorías." (Sanatahana Sarathi 7- 1989, p. 171 – en inglés). Lo que puede ser aún más interesante es que Sai Baba ha declarado: "Rávana poseía una cantidad considerable de poder mundano y aún poder moral…"; "Para él, su propio gozo, su propia seguridad, su propio placer era todo lo que le importaba. Debemos de notar aquí que, a pesar de sus grandiosos y buenas cualidades, su comportamiento era malo…Llegando al fin de su vida se vino a dar cuenta de que todo lo que había hecho era pecado…" (Summer showers in Brindavan 1977, p. 114ff).
A.B. Vajpayee, sin embargo, era un seguidor de Sai Baba desde mucho antes de haber sido nombrado como primer candidato del Partido Bharatiya Janata (BJP) para Primer Ministro, antes que el líder del partido, L.K. Advani. Cuando ganó las elecciones, le pregunté a mi buen amigo V. K. Narasimhan acerca de él. Como el famoso periodista que era, VKN conocía a Vajpayee y me contó que – durante la tarde de su victoriosa elección – Vajpayee había telefoneado a Sai Baba y le había dicho que quería ira estar con él, pero que no podía debido a que necesitaba formar un gobierno de coalición. Tal demostración de alianza a Sai Baba por parte de Vajpayee antes de tomar posesión de su cargo podría haber aislado a aquellos políticos que no tenían tiempo para Sai Baba, incluyendo a las hindúes fundamentalistas en el BJP y sus compañeros que estaban envueltos en – o tácitamente apoyaban – la destrucción de la mezquita de Ayodhya y la erección del templo del dios Rama en su lugar.
Uno sólo puede imaginarse que forcejeo por la vida y muerte política estará ocurriendo detrás de las fachadas, pero es muy probable que Vajpayee estaría extremadamente perturbado, tanto en lo persona como en lo político si encontrara que su sadgurú fuese en realidad culpable de las alegaciones en torno a él.